Publicado: 9 de Diciembre de 2015

En los días de más frío es bastante habitual que nuestro parabrisas se empañe al poco de montarnos, dificultándonos la visión y aumentando el riesgo de sufrir un accidente. Si a ello le sumamos el encontrarnos con una placa de En los días de más frío es bastante habitual que nuestro parabrisas se empañe al poco de montarnos, dificultándonos la visión y aumentando el riesgo de sufrir un accidente. Si a ello le sumamos el encontrarnos con una placa de hielo o nieve, aumenta aún más el tiempo y la paciencia para dejar nuestro campo de visión completamente despejado.

Ante un caso así, ¿qué debemos hacer? ¿Activamos el aire frío o el caliente? Debemos recordar que el empañamiento se produce por la diferencia de temperatura entre el aire exterior e interior. Al estar el cristal frío por su contacto con el exterior, el calor interior y la entrada de personas en el coche provoca la condensación que forma las gotas de agua en el cristal.

Si nuestro coche no cuenta con aire acondicionado o climatizador, la solución más eficaz es desempañarlos con el aire caliente. Deberemos esperar a que el vehículo coja suficiente temperatura y dirigiremos los aireadores hacia los cristales empañados. Activamos la calefacción al máximo y esperamos a que poco a poco vaya desapareciendo. Con el aire frío, es decir, el que entra directamente desde el exterior, también se quitaría, pero necesitaríamos más tiempo.

Pero la mayoría de coches más modernos cuentan con equipo de aire acondicionado y/o climatizador. En ese caso, el sistema enfría el aire pasando por un evaporizador, por lo que tendrá menor cantidad de agua al llegar al cristal. Al estar a una temperatura mayor que la exterior, el aire absorberá las gotas de agua y consumirá más rápidamente el vaho formado. Por lo tanto, apuesta por el aire caliente con el sistema de aire acondicionado conectado. Comprueba que no está activada la recirculación del aire para asegurarte de que siempre entra aire nuevo.

Algunos coches incorporaran un botón específico para el desempañado de cristales. Este está predefinido para aumentar la potencia y controlar tanto la potencia como la dirección de las salidas para ofrecer un desempañado rápido. No dudes en usarlo, ya que te sacará de un apuro más de una vez.

Sea cual sea la opción que utilices, para una mayor rapidez baja ligeramente las ventanillas del vehículo para compensar la humedad y temperatura exterior-interior., aumenta aún más el tiempo y la paciencia para dejar nuestro campo de visión completamente despejado.

Ante un caso así, ¿qué debemos hacer? ¿Activamos el aire frío o el caliente? Debemos recordar que el empañamiento se produce por la diferencia de temperatura entre el aire exterior e interior. Al estar el cristal frío por su contacto con el exterior, el calor interior y la entrada de personas en el coche provoca la condensación que forma las gotas de agua en el cristal.

Si nuestro coche no cuenta con aire acondicionado o climatizador, la solución más eficaz es desempañarlos con el aire caliente. Deberemos esperar a que el vehículo coja suficiente temperatura y dirigiremos los aireadores hacia los cristales empañados. Activamos la calefacción al máximo y esperamos a que poco a poco vaya desapareciendo. Con el aire frío, es decir, el que entra directamente desde el exterior, también se quitaría, pero necesitaríamos más tiempo.

Pero la mayoría de coches más modernos cuentan con equipo de aire acondicionado y/o climatizador. En ese caso, el sistema enfría el aire pasando por un evaporizador, por lo que tendrá menor cantidad de agua al llegar al cristal. Al estar a una temperatura mayor que la exterior, el aire absorberá las gotas de agua y consumirá más rápidamente el vaho formado. Por lo tanto, apuesta por el aire caliente con el sistema de aire acondicionado conectado. Comprueba que no está activada la recirculación del aire para asegurarte de que siempre entra aire nuevo.

Algunos coches incorporaran un botón específico para el desempañado de cristales. Este está predefinido para aumentar la potencia y controlar tanto la potencia como la dirección de las salidas para ofrecer un desempañado rápido. No dudes en usarlo, ya que te sacará de un apuro más de una vez.

Sea cual sea la opción que utilices, para una mayor rapidez baja ligeramente las ventanillas del vehículo para compensar la humedad y temperatura exterior-interior.


* Fuente: blog.ibericar.es